Estos eran unos hombres y mujeres, acostumbrados a decir promesas, pero luego las cumplían?
Promesa: “Mañana iré sin falta”
Estos hombres del cuento, la mayoría, ejercen una profesión técnica, algunos son electricistas, otros fontaneros, otros albañiles.
Y casi siempre uno tiene que llamarles muchas veces por teléfono para que acudan a realizar un trabajo o reparar algún daño.
Promesa: “No se lo diré a nadie”
En esta parte del cuento, nos encontramos con hombres y mujeres “amigos” nuestros, que cuando les contamos un secreto, nos prometen guardarlo, pero ni bien te has ido, prácticamente todo el mucho se entera de tu valiosos secreto.
Promesa: “No te dolerá”
Aquí intervienen algunos médicos, dentistas o enfermeras que cuando vas a tener alguna cirugía o van a pincharte, utilizan esta promesa para relajar al paciente, aunque luego sí sentimos dolor. Creo que sería mejor que te dijeran "va a doler muy poco".
Promesa: “Mañana te pago sin falta”
Aquí aparecen las personas a las que prestas dinero y cada vez que te las encuentras, siempre te dicen que te pagarán mañana, que esperes su llamada, pero es sabido que tendrás que ser tú el que llames e insistas, para recuperar lo que has prestado.
Promesa: “Siempre te amaré”
Para concluir el cuento, por lo general, siempre decimos esta frase a nuestra persona amada, claro cuando hay amor, pero y cuando se termina el amor?
MORALEJA:
No debemos prometer cosas que no vamos a cumplir, antes de hacer promesas tenemos que ser sinceros con nosotros mismos, porque será nuestra conciencia la que juzgue nuestros actos.
1 comentario:
Un placer visitarle y seguirte amiga.Lindo espacio. Lindas poesías y interesantes historias. Que tengas un buen día.
http://socialculturalyhumano.blogspot.com/
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